Nuestros estudiantes llenaron el escenario de luz y armonía al interpretar una variedad de instrumentos, dejando en claro que la música es un lenguaje universal que trasciende fronteras y barreras.
Lo que hizo este evento verdaderamente especial fue su capacidad para unir a estudiantes con discapacidad con músicos de una Orquesta Sinfónica, creando un espacio de inclusión e interacción única. Además, permitió que todos los asistentes reconocieran y apreciaran la riqueza de sonidos que conforman esta majestuosa orquesta.
Los verdaderos protagonistas fueron nuestros estudiantes con discapacidad, quienes compartieron sus logros musicales con un público entusiasta y conmovido. Este concierto se convirtió en un testimonio vivo de que la música es un puente que une corazones y capacidades, superando cualquier obstáculo en su camino. Una vez más, se demostró que la música es para todos.
Este conmovedor evento fue un recordatorio de que la música es un regalo que puede enriquecer nuestras vidas y conectarnos de formas que van más allá de las palabras. La magia de la música se hizo presente y dejó una huella imborrable en todos los corazones presentes.
